La plicatura gástrica consiste en disminuir la capacidad del estómago por medio de un doblez mantenido con puntos de sutura, haciéndolo más pequeño pero sin graparlo ni cortarlo como en el Bypass o la Manga. Es un procedimiento potencialmente reversible y de mínima invasión ya que se realiza por laparoscopia, bajo anestesia general. A veces los pacientes se pueden marchar al domicilio en el mismo día.
Por lo tanto, puede ser un procedimiento ambulatorio en algunos casos. Los primeros días puede sentir malestar y náuseas, que desaparecerán tras poco tiempo. Si estas molestias son bien toleradas, el paciente se irá el mismo día. De lo contrario, se deberá quedar en el hospital una noche. Se trata de un procedimiento que no requiere del seguimiento estricto ni ajustes por parte de su médico.
La Plicatura funciona de modo que disminuye la capacidad del estómago (el paciente se siente lleno con lo que cabe en un plato de postre), y el estómago pierde la capacidad de distensión, evitando la ingesta excesiva. Por tanto, obliga al paciente a cambiar sus hábitos, comiendo 5 veces al día. Con ella, la función digestiva es normal: todo lo que se come se absorbe y no es necesario tomar suplementos alimenticios.